Y si, de verdad estas islas están encantadas. Son únicas en el mundo. Un gran tesoro para preservar. Es imposible describir lo que se siente al visitarlas. Hay que estar allí. Ahora comprendo a Melville cuando decía que, a través del tiempo, sus imágenes una y otra vez volvían a su mente en cualquier lugar que se encontraba, sin comprender por qué. ¿Qué tienen esas islas, se preguntaba? Tampoco sabría contestarle esa pregunta, pero si vas, no te querés volver. Y cuando estás lejos soñas con volver.
Imágenes de iguanas, tortugas, piqueros, pinzones... pasan por mi mente mientras voy abriendome paso por el tránsito abarrotado de mi ciudad
También comprendo porque significaron tanto para Darwin. ¿Que naturalista no se siente en el paraiso?
Allí se encuentra el laboratorio natural de la evolución al alcance de la mano. A pesar de las modificaciones de la civilización, la naturaleza se abre camino y lo único permanente es el cambio, la adaptación y la lucha por la existencia.
Isabela
Hace 14 años
